Todo sobre cocina

El huevo es un alimento natural imprescindible en cualquier cocina. Rico en vitaminas, minerales y proteínas, puede ser consumido de modos muy diversos. El de gallina es el más común, pero también se emplean los de pata, gansa, pava, codorniz y faisán, etre otras aves. Pero, cualquiera que sea el que se utilice, lo más importante es que sea fresco, pues de lo contrario, puede resultar indigesto. Uno de los métodos para comprobar su frescura es sumergirlo en agua fría y salada. Si es fresco, se hundirá. También es recomendable que se conserve en posición vertical y a temperatura ambiente.

El huevo como complemento

El huevo es un alimento de gran versatilidad y puede emplearse entero o bien separadamente la yema y la clara. La forma más frecuente que adopta como complemento es la del huevo batido, que se emplea para espesar sopas, guisos y salsas, así como para levantar bizcochos y masas, para ligar rellenos o mezclas y para la elaboración de tortillas. No se puede olvidar que, mezclado con harina o pan rallado, constituye el rebozo con que se fríen algunas preparaciones, como las croquetas, escalopas o milanesas.