1. Retirar los ojos y la boca al pulpo y limpiarlo bien.
2. Golpearlo enérgicamente para romper las fibras de los tentáculos (también va muy bien congelarlo y descongelarlo al ir a cocinarlo); estas preocupaciones son importantes para que el pulpo no quede duro.
3. Poner una olla al fuego con el fumet que habremos preparado con antelación. Cuando hierva, introducir el pulpo en la olla y sacarlo. Repetir esta operación tres veces.
4. A la tercera vez, dejar dentro de la olla el pulpo y añadir la patata sin pelar. Dejar que hierva.
5. Cuando la patata esté cocida, el pulpo también lo estará. Entonces escurrirlo, dejarlo que se enfríe y cortarlo en rodajas.
6. Preparar la salsa mezclando el aceite, el vinagre o zumo de limón, el pimentón, la pimienta negra y la sal y batir bien para que quede todo unido.
7. Colocar los trozos de pulpo en una fuente y rociar con la salsa.
8. Es un plato muy adecuado para servir frío, como aperitivo.