1. En una cazuela, poner a cocer el azúcar en el agua.
2. Espumar de vez en cuando, hasta que se forme una capa casi aceitosa.
3. Pelar la fruta, retirar las pepitas y cortarlas en octavos.
4. Añadir la fruta al almíbar y dejar cocer a fuego muy suave, durante unos 10 minutos.
5. Disponer la fruta y el almíbar en una fuente de cristal.
6. Dejar enfriar y luego introducirla en el refrigerador unas 2 horas antes de hervir.