1. Moler las almendras con el azúcar en un robot de cocina hasta conseguir un polvo fino. Ponerlo en un cazo y agregar medio litro de agua. Guardar en la nevera tapado toda la noche.
2. Calentar la leche en una cacerolita y agregar las ramitas de canela y hacer hervir. Quitar la canela y mezclar con el agua de azahar.
3. Pasar la mezcla de almendras por un tamiz y mezclar el líquido obtenido con la leche. Servir con cubitos y canela en polvo.