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1. Empezaremos nuestro queque fácil y rápido separando las yemas de las claras de los huevos. Hecho esto, mezcla en un recipiente aparte las yemas con el azúcar y el aceite. Cuando estos ingredientes estén bien integrados, vierte la taza de leche y sigue batiendo. Precalienta el horno a 200ºC.

2. Ahora deberás batir las claras en otro recipiente y, cuando estén bien batidas, incorpóralas a la mezcla anterior e intégralas haciendo movimientos envolventes. Es muy importante que las claras no queden como merengue.

3. Cuando tengas todos los ingredientes mezclados, empieza a agregar la harina previamente tamizada y mezclada con el polvo para hornear. No es necesario que la mezcles de forma enérgica, simplemente deberás introducirla haciendo movimientos envolventes suaves puesto que la masa del queque debe quedar un poco espesa.

4. Luego, agrega a la masa la ralladura de limón o, si lo prefieres, una cucharadita de esencia de vainilla. Finalizada la mezcla, viértela en un molde apto para horno y previamente untado con un poco de mantequilla para evitar que se pegue.

5. Baja la temperatura del horno a 170ºC y hornea el queque durante 40-50 minutos, en función de la potencia de tu horno. Deberás vigilarlo para asegurarte de que se hace correctamente y no se quema o, por el contrario, necesita más tiempo de horneado.