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1. Limpiar, lavar y trocear la gallina. Ponerla en una cacerola con agua y sal. Añadir la zanahoria, el apio, una cebolla y un ramillete de hierbas aromáticas. Añadir una pizca de sal y dejar hervir.

2. Pasada una hora larga, sacar la gallina y deshuesarla. Cortar en tiras alargadas.

3. Poner en un recipiente parte de la leche y seis rebanadas de pan.

4. Calentar aceite. Poner dos cebollas trituradas y un diente de ajo entero.

5. Aromatizar con pimentón. Añadir las nueces trituradas y salpimentar. Dejar que se rehogue cinco minutos.

6. Poner el pan empapado en leche y añadir la leche restante dejando que se condense a fuego fuerte.

7. Añadir la gallina troceada y el queso parmesano y dejar al fuego hasta que el queso se derrita. Poner a hervir las patatas cortadas en rodajas.

8. En una fuente, sobre un fondo de patatas verter el contenido de la sartén con la gallina. Decorar con las aceitunas y los huevos duros. Adornar.